Cada vez que realices un trabajo mediante el cual cambies la apariencia original de un metal, si esperas un buen acabado y que, además, sea duradero, tienes que informarte bien sobre el material y los productos que vas a utilizar.
En la industria del mueble, la composición de los metales utilizados puede variar mucho, pero a todos les puedes dar una segunda vida con pintura.
Alerta: En este bricolaje se utilizan varios productos químicos y herramientas. Necesitarás: guantes para pintar, guantes para viruta o lana de acero, anteojos de protección y mascarilla con filtro para polvo y olores tóxicos.
Debes trabajar en un sitio ventilado, libre de objetos, y proteger el suelo.
#1 Asegúrate de conocer el material
Determina de qué material está hecha la mesa. Si la tuviera, raspa la pintura vieja para descubrirlo.
#2 Limpia por completo
Si la mesa tiene poco sucio y no tiene capas de pintura a base de aceite, lávala con agua y detergente. Este podría ser el caso de mesas de aluminio con pintura electrostática.
Si tiene capas de pintura vieja, será necesario retirarlas. Aplica solventes o decapantes, estos productos vienen líquidos en botellas o en spray. Trabaja por áreas, coloca producto sobre dos zonas de la mesa, espera cinco minutos y retíralo con una espátula de la primera parte. Si salió por completo, aplica en una nueva zona y procede a limpiar la que faltaba. Continúa así sucesivamente. Si no saliera toda la pintura, puedes repetir este paso en las áreas donde sea necesario.
Si la mesa tiene óxido, aplica un producto especial para retirarlo, si lo dejas, arruinará el trabajo. El aluminio también se oxida.
Si el óxido ha causado que la mesa o partes de ella se rompan, debes repararlo o perderás tiempo, dinero y esfuerzo. Será necesaria la ayuda de un soldador o un herrero que subsane el daño. El aluminio también se puede soldar.
#3 Líjala
Lija toda la mesa, es necesario para obtener un buen acabado y que la pintura se adhiera de la manera correcta. He aquí otro detalle: el número de la lija que uses dependerá del material de la mesa.
#4 Aplica la base
Aplica una base de imprimación especial para el material de tu mesa. Es muy importante, ya que, ¡sí!, hay diferencia y variedad de productos. Deja secar muy bien esta capa protectora y sigue las instrucciones del producto.
#5 Píntala
De nuevo teniendo en cuenta el material, escoge una pintura adecuada para tu mesa. En este paso debes seguir las instrucciones del fabricante, respeta siempre los tiempos de secado.
Importante
Para aplicar la pintura sobre el metal, la mejor herramienta es una pistola de aire comprimido proveniente de un compresor, nos ayudará a pintar rápido y con un acabado uniforme.
Las pinturas en spray tienen el mismo acabado de la pistola. Y, si tienes que utilizar una brocha o rodillo, la mejor alternativa son los elaborados en esponja. Las brochas de pelo pueden dejar marcas de brochazos o restos de pelos en la pintura.
Y manos a la obra.